DISCO: PRIDE AND GLORY
AUTOR: PRIDE AND GLORY
PRIMERA EDICIÓN: 1994

Bien conocida es la versatilidad de Zakk Wylde, así lo ha demostrado a
lo largo de los años que lleva en el mundo de la música. Pero sin duda
estamos ante una de sus obras más infravaloradas y que a su vez ciertos
críticos han llegado a calificar como uno de los mejores discos de los
últimos veinte años... Cada uno que juzgue por si mismo.
El disco no
es sino una mezcla entre el Heavy Metal más puro con Rock sureño,
Country, Blues... Y lo que en principio podría parecer un vano intento
por innovar o una muestra sin precedentes de pretenciosidad o soberbia,
se convierte en una obra maestra de la música.
Empezando por los
primeros acordes del disco, un solitario banjo con una melodía muy
yankee y que a la postre se convierte en el riff principal del tema y al
que se unen la batería y la guitarra, deja un muy buen sabor de boca,
en una canción para la que se grabó un video-clip: “Losin´ your mind”.
Zakk hace un alarde vocal realmente impresionante tanto en éste como en
el resto de los temas. Un registro muy amplio, potencia y dominio de
semejante instrumento, como es la voz, sugiere al oyente una
versatilidad increíble, poco común en un músico. El segundo corte es el
single del disco; “Horse called war” es un tema muy directo, sin adornos
ni rodeos y destinado a que la melodía se quede en la mente del que la
escucha desde la primera vez.. La potencia con la que la canción es
interpretada en todos y cada uno de los instrumentos queda patente. Hay
que prestar especial atención a la fuerza que “el rubio” le imprime a
la voz.... El disco continúa con un par de temas que en principio
resultan un tanto difíciles de digerir. El primero tal vez debido a la
mezcla de estilos o por la marcada presencia de la harmónica, incluso
tal vez por el significativo parón a mitad de tema, con un cambio muy
brusco que crea una confusión en el oyente; En el segundo por tratarse
de un tema algo más acústico, aunque no exento de belleza y calidad...
En cualquier caso son de esos temas que tardas en sacarles el jugo, pero
cuando lo haces disfrutas mucho escuchándolos.
Tras esto le toca el
turno a una composición muy buena, “Harvester of pain”, que comienza
como a Mr. Wylde le gusta adornar los temas: con unos sonoros harmónicos
de guitarra y que habla de los “ azules y grises” en la guerra de
Secesión Americana. “The chosen one”, dedicada a su padre, al que tiene
en un pedestal y a la que da término con un bonito -“ te quiero, papá”-
es el preludio de una hermosísima balada en la que Zakk se queda sólo
ante el piano y con unos pequeños arreglos orquestales. Capaz de
arrancar las lágrimas a cualquiera, con una voz exquisitamente dulce y
donde hace alarde de su increíble dominio de las cuerdas, en este caso
vocales, quiso titular al tema “Sweet Jesus”. El disco continua con
cortes como “Troubled wine” o “Machine gun man”, de la que hay una
grabación para la Mtv acústica y de la que es fácil descargarse el
video-clip en cualquier programa p2p. “Cry me a river”, sin duda uno de
mis temas favoritos del gran Zakk no es sino un tema al más puro estilo
Country, muy pegadizo y con uno de los mejores solos de guitarra que he
escuchado a lo largo de mi relativamente abultada trayectoria en esto
del Heavy Metal: sencillamente perfecto y que continúa con el corte más
largo del disco; “Toe´n the line” ( algo más de siete minutos) y donde
también nos encontramos un considerable parón a mitad de canción. En
este sentido hay una anécdota, y es que en la edición en doble CD de
Spitfire Records del año 1999 hay una errata, ya que en dicha edición
han suprimido el corte siguiente ( “Found a friend”, una bonita balada
al más puro estilo Ozzy, y donde más se nota su estrecha relación con el
Madman) dando como ésta la segunda parte del ya mencionado “Toe´n the
line”: algo a tener en cuenta para coleccionistas, aunque a un servidor
le resultó bastante fastidioso carecer de una balada tan fantástica como
es ésta. En la cinta editada en 1994 por Geffen no hay ningún problema
referente a este hecho, y supongo que en formato CD tampoco, pero lo
ignoro. La que sí está es “Fadin´ away”, otra balada con la que también
se queda frente al piano, idónea para escuchar esos días lluviosos y
tristes.
El sentido del humor de Mr. Wylde es bien conocido por todo
el mundo y lo demuestra con el último “I hate your guts” y que comienza
con una broma al técnico de grabación. Para que os hagáis una idea de
cómo se las gastan estos tipos, el estribillo reza: “ Odio tus tripas.
Desearía que estuvieses muerto. Odio tus tripas. Lo que digo es que eres
condenadamente tonto. Odio tus tripas y desearía que estuvieses muerto.
Yo mismo cavaría el agujero, pero acto seguido pasaría con mi camión
por encima”... el resto no tiene desperdicio, de veras.
En la edición
con doble cd se incluye versiones de Black Sabbath, Led Zeppelin, The
Beatles y dos temas más, eso después de mas de 70 minutos de música...
No está mal, ¿ verdad?
Por último reseñar que James LoMenzo (
bien conocido por su trabajo en White Lion) hace una labor fantástica al
bajo y en la guitarra de doce cuerdas en “ Fadin´ away”: todo hay que
decirlo; Brian Tichy, un fantástico y desconocido batería, al que Zakk
conoció en el instituto, que adorna de forma magistral las canciones es
el encargado de la percusión. Y un propio Zakk Wylde con una voz
increíble ( mucho mejor que cantantes de sobra conocidos), unas
guitarras como todos sabemos de las que es capaz, banjo, mandolina,
harmónica, piano, coros... y para más “inri”, compositor de todos los
temas.
Sin duda alguna estamos ante uno de los discos
imprescindibles en la discoteca privada de cualquier amante de la música
bien hecha. Si aún no lo has escuchado, no pierdas el tiempo y hazte
con este magnífico trabajo.
Actualmente Zakk W. ha hablado de la
posibilidad de volver a reunir ésta formación para grabar un nuevo
trabajo. Esperemos esto ocurra pronto.
Xentrix - 08/09/04