Este reportaje no es nuevo. Lo recupero de Metal4all, donde fue publicado el 17 de diciembre de 2004, como homenaje al fallecido Chuck Schuldiner. En el aniversario de su muerte quiero recordar su memoria y, al mismo tiempo, agradecer a todos aquellos que lo habéis leído. Habéis sido tantos, que me ha desbordado por completo.
“THAT IS NOT DEAD WHICH CAN ETERNAL LIE.
AND WITH STRANGE AEONS EVEN DEATH MAY DIE.”
-H.P. Lovecraft-
AND WITH STRANGE AEONS EVEN DEATH MAY DIE.”
-H.P. Lovecraft-
Al final resultó ser cierto que había un nervio pinzado, pero la causa era un tumor cerebral... La noticia venía acompañada de las pocas expectativas de vida que el médico le daba a Chuck. Debido a su carácter pidió una segunda opinión, una tercera e incluso una cuarta. Lo único que quería oír; lo único que él necesitaba era que alguien le dijese que todo iba a salir bien, para despreocuparse de todo y continuar con su vida; con su trabajo; con sus ilusiones... Sus ganas de vivir rechazaban las negativas de todos los doctores que visitó. Ese era su carácter.
Paradójicamente algunas frases del disco que acababa de componer tenían frases así: ”No hay tiempo para la autocompasión. No hay tiempo para divagar sobre lo que podría haber sido, pero aún puede ser”. Cuando Charles escribió estas líneas ignoraba lo que el futuro le deparaba. En realidad las letras de Control Denied rebosaban filosofía de vida, que resultaron ser proféticas. El destino ( en el cual no creía) le había jugado una mala pasada. A él, a su familia y a sus seguidores. Estos últimos también formaban parte de su familia. Su naturaleza hacía que cualquier persona que quisiese algo de él fuese bien recibida. Le encantaba estar rodeado de sus fans, firmando autógrafos y conversando con ellos.
También era un entusiasta de la cocina. De hecho siempre que no estaba de gira u ocupado, grabando discos o componiendo, su familia iba a cenar a su casa y Chuck se pasaba toda la tarde preparando platos culinarios. Siempre que podía iba de pesca con sus amigos. Era un amante de la naturaleza y de los animales. Rescató a su perra cuando sólo era un cachorro. Estaba atrapada en una bolsa, condenada a morir en un sucio vertedero. La llamó Heidi. Era especialmente cariñoso con sus mascotas: ”Mis chicos”, como les llamaba él. Pasaba mucho tiempo con sus perros y gatos siempre que no estaba ocupado. El tiempo que tenía libre lo dedicaba a cosas tan humanas como coleccionar discos o montar en canoa, entre multitud de cosas.
Como casi todos los chiquillos empezó a tocar la guitarra pronto, dando algunas clases. Su madre habla de ello con orgullo: - “Le compramos una guitarra y empezó a recibir clases, pero pronto se cansó. Se aburría mucho en clase, de modo que se puso a estudiar por su cuenta. Prácticamente todo lo aprendió de forma autodidacta”-.
En realidad es algo que se puede apreciar cuando ves un directo de Death... Su forma de tocar tiene un estilo bastante curioso, empezando por la forma de coger la púa. Si nos fijamos con detenimiento tiene una muñeca derecha bastante “dura”, a penas la mueve y se le nota cierta rigidez. También es muy llamativo lo mucho que levanta los dedos del mástil de la guitarra cuando toca los solos.
De haber recibido clases con un guitarrista todos esos errores se los hubiesen corregido a tiempo. No es que Chuck tocase mal la guitarra. De hecho es impresionante ver como, con el paso del tiempo, iba evolucionando. Pero sí es cierto que de haber corregido esas imperfecciones hubiese desarrollado mucho más su velocidad. Para nada pretendo sacar a relucir sus defectos ( que como todo humano, tenía), sino todo lo contrario: trato de dar a entender la perseverancia que poseía en todo cuanto hacía.
- La perseverancia es una palabra importante en la vida de cualquiera-, decía siempre. Y perseveró. Aún cuando los médicos le daban una negativa como esperanza, él seguía sonriendo. - Estoy en mi cuarta semana de radiación con los mejores especialistas en la materia. También estoy bendecido con el inmenso amor y apoyo de mi familia y amigos, que son una parte esencial en mi mejora. El tratamiento está yendo muy bien. Con esta terapia agresiva el pronóstico es muy bueno. La paciencia es algo que he aprendido a abrazar en mis catorce años en el mundo de la música y ahora es el momento de ampliar el arte de la estoicidad en mi camino a la recuperación-. Incluso cuando salió del quirófano tras una operación, sus palabras fueron estas: - Estoy vivo y dejando que el metal fluya! Acabo de terminar de escribir la última canción de Control Denied... Y está alejada al 100% de las tendencias actuales-.
Nada le desanimaba. Tenía una forma de ver la vida digna de envidiar. Esto lo contaba su antiguo manager, Eric Greif, que decía a un periodista cómo fijaba la miseria en su cara y la mataba con optimismo en estas líneas: - Un momento en particular se quedará en mi mente para siempre: íbamos de gira en el autobús, en algún lugar nevado de Suecia. Debíamos ser los únicos que aún estaban despiertos. Nos sentamos en las escaleras del principio, junto a la cabina del conductor y manteníamos una profunda conversación sobre nuestras vidas, nuestro futuro y sobre la banda. Me di cuenta de cómo se iba desarrollando la conversación y llegamos a un punto en el que Charles puso su brazo en mi hombro y señaló las estrellas, que brillaban muy claramente. Dijo que no teníamos nada que temer, que el destino nos conduciría en nuestro camino y las cosas irían tornando de forma debida. Él era así, tenía momentos de una profundidad, honestidad y convicción enormes. Esas son las características que perdurarán en mi mente-.
La fama tampoco era algo a lo que temiese. En una entrevista a Guitar World en 1995 afirmó: - Nunca nos hemos dejado humillar por gente de la industria que ha tratado de hundirnos. Estoy orgulloso de no haber tenido jamás ningún problema de drogas o contemplar la posibilidad de matarme, como Kurt Cobain. Lo siento, pero eso es algo que ni sueño; no por ver mi nombre impreso ni porque nuestra música sea reconocida a gran nivel-.
Por supuesto hay una gran suma de revistas donde Chuck se expresó y una enorme cantidad de diálogos, dejando frases muy significativas sobre su forma de pensar...
- Me siento bendecido en el modo que, como banda, tenemos un enorme abanico de seguidores-.
- Perseverancia es una palabra importante en la vida de cualquiera-.
- Creo que cosas buenas están aún por llegar...-.
- Control Denied es lo que me mantiene motivado-.
- Sobrevivir es un arte: superar experiencias negativas y realizar tu propio sueño-.
- La música me ha salvado la vida en numerosas ocasiones-.
- Soy un soñador y he estado siguiendo este sueño durante quince años de mi vida-.
- Siempre he tenido una visión para Death, siendo ésta el tipo de banda que muestra una constante improvisación-.
- Creo que la vida sigue su curso, reuniendo a la gente correcta en su debido momento-.
- Mi sueño sería poder dar vida a un grupo en el que se toque Heavy Metal clásico con Ronnie J. Dio cantando-.
- Todo lo que sucede, es por alguna razón-.
- ...Creo que da un propósito a gente como nosotros. Ya sabes, jóvenes de pelo largo que tocan en bandas de Heavy Metal y a los que le gusta escuchar música. Tenemos valor para la sociedad-.
- Las palabras articuladas deben tener algún significado-. ( Sobre Empty Words)
- Me considero muy afortunado y estoy encantado de trabajar con gente que me apoya ahora-.
- No podrá hacerme caer!...-. (sobre su cáncer)
- Uno no aprecia la importancia de las cosas en vida porque todos creemos que nada nos pasará-.
- Planeo progresar y añadir nuevos elementos a mi música con cada disco, sin alterar drásticamente el sonido de la banda-.
- Sólo soy un ser humano...-.
- He hecho todo esto desde que tenía dieciséis años y no he amasado mucho dinero con ello-.
- No digo que no haya buenos grupos jóvenes, ni mucho menos: pero Metal inteligente... Es raro-.
- Soy el primero en reconocer que nuestras primeras demos no eran muy buenas, pero nunca fuimos una banda ruidosa, aunque la calidad sonora de algunas de esas grabaciones pueda inducir a pensar eso-.
Estas frases son parte de las entrevistas concedidas a lo largo de su trayectoria como músico en diferentes publicaciones y fechas. Tanto Death como Chuck no eran asiduos de las revistas, ya que no era un grupo de masas. Es curioso que, siendo el precursor y padre ( aunque odiase esta afirmación) de un estilo como el Death Metal, no fuese precisamente una de las bandas más representativas en cuanto número de ventas... o al menos no fuese la que más, pero siempre había un hueco en las publicaciones cuando Chuck tenía algo que decir... Lo más revelador es que en nuestro país las revistas no se hiciesen eco de la triste desaparición de una de las más grandes personalidades en el mundo del metal extremo de la forma que merecía. No sólo es curioso, sino que es lamentable. Tan sólo una revista dedicó una portada a Chuck cuando éste falleció, relegando de forma natural la cabecera que tenían prevista como reclamo para los lectores e incluyendo un extenso reportaje de su vida y obra. La nota más triste y lamentable la protagonizaron el resto de publicaciones nacionales, no sólo negando una merecida portada... Que digo merecida!; merecidísima portada; sino que incluso a penas sí hicieron mención de la triste pérdida para toda nuestra comunidad, atreviéndose a publicar ínfimas columnas o escuetas reseñas que en muchos casos eran enviadas por los propios lectores, limitándose en la mayoría de los casos a lo que parecían tristes esquelas sacadas de diarios de tirada nacional.
Todo esto es comparable con el mercado petrolífero: agotan todos los recursos disponibles para vender y amasar dinero y una vez explotado el terreno, recogen los bártulos para desplazarse a otra zona que les proporcione su codiciado capital, a expensas de una mercancía que muchas veces son ellos mismos los encargados de ensalzar como necesaria para los consumidores.
No es que pretenda dirigir una cruzada contra los medios, aunque reconozco que esto es algo que siempre he defendido de forma categórica en cualquier conversación. Pero es que nunca he llegado a comprender como se ha podido ignorar desde las altas esferas de la política Heavy nacional un hecho tan amargo como fue la pérdida de Charles. En otros países organizaban festivales benéficos con el fin de recaudar fondos para la operación de Chuck, donándolo todo a la familia con la esperanza de ver una pronta recuperación de nuestro protagonista y, cuando de forma triste, a éste le llegó su último aliento, aquí ni siquiera se han dignado aún en hacerle un merecido reportaje. Pasan los meses y no se ve más que una y otra vez las mismas portadas y los mismos grupos encabezándolas... Supongo que antes he utilizado la palabra clave: política. Estamos tan politizados, que ya no sabemos discernir entre lo que realmente tiene interés y lo que esta colmado de intereses.
Era Jueves, trece de Diciembre de 2001 y a Chuck le tocaba inspección médica en el hospital. Al terminar la sesión regresó a su casa en Altamonte Springs... Una hora después de su regreso de la clínica, su alma abandonó el cuerpo que había habitado durante treinta y tres años por culpa de una neumonía. Y con ella, la esperanza de miles de seguidores en todo el globo.
El legado musical que podemos disfrutar gracias a Charles y sus compañeros es extenso, rico y variado. Todos nos preguntamos qué rumbo habrían tomado sus composiciones; o si habría podido superar sus anteriores alardes creativos... Las preguntas quedan en el aire. Jamás sabremos qué otras cosas nos podría haber regalado Chuck, pero si hay algo cierto es que siempre que escuchemos metal extremo, estaremos pensando un poco en nuestro héroe.
Hoy es día trece. Número maldito para los supersticiosos. Hoy hace exactamente tres años que “Evil” Chuck abandonó este mundo, habiéndonos dejado un legado musical que nunca se olvidará y perdurará, esperemos, durante mucho tiempo.
Gracias, Chuck.
“Algunos sólo escuchan música...
Algunos hacen música...
En cualquier caso hay algunos... Que crean música...”
Algunos hacen música...
En cualquier caso hay algunos... Que crean música...”
Impresionante, si señor, un tipo especial al que la vida le jugó (como a muchos) una mala pasada, la peor pasada diria yo. Su legado es eterno, y aunque para muchos solo fue una esquela en una esquina como bien dices, para los que amamos la música dura, fue una perdida bestial. Grandisimo artículo, enhorabuena
ResponderEliminarSí señor, un artículo muy currado.
ResponderEliminarNo está mal este In Memoriam. Un buen artículo el suyo.
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